Ayer se celebró la convocatoria XV del V-Day, un movimiento mundial creado hace 15 años con el objetivo de luchar contra la cultura de la violación y los malos tratos hacia mujeres y niñas.
Según la ONU una de cada tres mujeres en el planeta es golpeada, violentada de alguna forma, secuestrada explotada laboral o sexualmente. Con la población mundial por encima de los siete mil millones, esto significa que mil millones, o lo que es lo mismo, un billón de mujeres y niñas enfrentarán, o experimentarán personalmente violencia (física, sexual, psicológica). Me refiero a madres, hijas, hermanas, campesinas, profesoras, ejecutivas, amas de casa, economistas, medicas, abogadas, psicólogas, estudiantes, cocineras,…..que sufren múltiples abusos a lo largo de sus vidas.
Hace dos semanas llegaban noticias de un grupo de chicas españolas violadas por un grupo de hombre en grupo en Cancún, Méjico pero en ese país hay continuamente asesinatos, explotación, trata y violencia hacia las mujeres. En España a 14 de febrero ya hay 13 mujeres que han muerto asesinadas y el año 2012 cerró con 107 mujeres muertas por feminicidio.
Ayer la campaña del V-Day fue levantar a un billón de personas en todo el mundo por el fin de la violencia sexual y el maltrato que padecemos mil millones de mujeres y niñas. Lo consiguieron. Multitud de vídeos colgados en la red muestran a mujeres y hombres moviéndose libres, críticos, sanos para mostrar su repulsa hacia la violencia.
En el centro Pueblos Unidos, en la Ventilla, también lo hicimos. Un grupo de mujeres, algún hombre y hasta un niño bailamos y recordamos que nosotras danzamos porque somos libres, porque hay otras mujeres que o no pueden hacerlo, o han sido asesinadas y ya no volverán a moverse. Para mostrar nuestro rechazo a aquellas formas de violencia sutil o manifiesta que viven las mujeres, para hacer saber a todas las mujeres que viven violencia que no están solas y puedan levantar su voz y rechazo.
También actuamos porque creemos en la educación y los valores que se pueden transmitir, para que las autoridades den prioridad a todos los temas relacionados con prevenir, sancionar y erradicar la violencia hacia las mujeres, impulsándose un movimiento mundial en contra de la violencia que no sea ignorado, en definitiva que ante los distintos tipos de violencia hacia la mujer la tolerancia sea nula.
Bailar es conectarse con el cuerpo, con la libertad, con la depuración, con la seguridad de la persona misma y con la de otras miles de personas hasta moverse un billón. Gracias por compartirlo.
Alejandra Luengo