Amar no significa amar bien
Amar en pareja. Los corazones rojos se imponen con la llegada de San Valentín en unos días. El día 14 de febrero se acerca y las frases de amor que se encuentran en distintas redes sociales, internet, revistas, etc afloran, se multiplican y a veces sorprenden: «Te amaré hasta la muerte», «Un hombre quiere ser el primer amor de su amada. «»Una mujer quiere que su amado sea su último amor», «Te doy todo lo que soy»,«No sé si te quiero, no sé si te amo, sólo sé que necesito tenerte a mi lado», El amor sólo puede emerger cuando hay un total abandono de uno mismo», «Dame todo de ti, que yo te daré mi vida.» «Entrégame tu alma, tus sentimientos y tu corazón. Yo te daré a cambio mil felicidades«. Multiplicidad de frases en las que se identifica el amor como una renuncia, una entrega total, un abandono y donde se ha normalizado el sufrimiento y dolor. Es el famoso amor romántico donde el drama parece que siempre está acechando en una relación de pareja, sea hererosexual u homosexual.
Generalmente todos queremos ser amados y todos deseamos amar a alguien pero ¿sabemos hacerlo? Después de años viendo a parejas y a familia,s y por mi propia experiencia me di cuenta que el problema no es amar sino saber amar bien. La mayoría de las personas que te dañan son personas que son importantes para ti. Lo mismo sucede en la relación de pareja donde a menudo las personas se repiten que se aman, pero por distintos motivos no saben enfocar ese amor de una forma en la que la ambos crezcan y no se perjudiquen.
Construir una relación de pareja saludable no es tarea fácil. A menudo se realiza teniendo como cimientos el miedo, la inseguridad, la desconfianza, el pasado, la rabia… lo que conlleva a que aflore y dañe el vínculo de una forma muy sútil. En las terapias de pareja precisamente lo que se logra es reconocer que a menudo no saben quererse bien, poder exponer todas las emociones que afloran y ponerlas en palabras. Identificar de dónde vienen y situarlas en su contexto pasado y presente para reubicar desde dónde quieren amarse y lo que necesitan para hacerlo, ya que si queremos a otra persona no tendríamos por qué hacerla sufrir, ni ella a nosotros tampoco.
El amor se construye desde los primeros momentos y de forma continua. Es como una semilla que se siembra y que depende de los cuidados, atención y voluntad de los jardineros para ir convirtiéndose en una planta firme, un tallo torcido, algo pequeño y voluble, o una semilla que directamente no germinará. Aquí van algunos aspectos qué considero fundamentales para amarse bien en una relación de pareja
– Una buena aceptación de la otra persona. Si la has elegido no pretendas que sea de otra forma a lo que es, o cambiarla.
– Comentarios constructivos hacia la relación en cosas específicas pero no ataques indiscriminados hacia la misma o a tu pareja.
– Cuidar al otro pero no protegerlo a toda costa. La persona puede descubrir sus recursos y no hace falta sobreprotegerla. El motivarse mutuamente para desarrollarse es muy enriquecedor.
– Una relación basada en la confianza sabiendo que hay momentos en la pareja más débiles, y crisis que se pueden superar.
– Ser uno mismo pero pensando en la pareja. Que alguien te quiera no significa que tenga que hacer lo que tú quieres ni cuando tú lo requieres ni del modo que tú planteas. No exigir.
– Una relación basada en la libertad de ser uno sin obligar al otro a hacer algo que no quiere. Hay un respeto mutuo.
– Donde no existe violencia de ningún tipo ni culpabilizaciones. Violencia entendida desde un sentido amplio de ataque y crítica hacia el otro que puede ser física, verbal o sexual
– Donde hay una comunicación clara y respetuosa sin ser criticado vorazmente. Se habla de lo que sucede.
– Donde se disfruta compartiendo vida y momentos juntos, buscándose los espacios para hacerlo.
– Donde se expresa a la otra persona que se le quiere y es importante.
Como no es fácil y nos nos han enseñado a hacerlo, aprendamos, ya que no hacerlo conlleva mucho dolor y sufrimiento por el camino. No es cuestión de la cantidad que se ama, sino del cómo amamos. Eso supone un reaprendizaje continuo en el que hombres y mujeres estamos inmersos. Es nuestra responsabilidad.
http://www.youtube.com/watch?v=PcH2PS2-lqU
Alejandra Luengo